Durante los últimos 10 años se nos ha intentado convencer de que los estudios universitarios y de postgrado no son necesarios para triunfar en la vida, asociando las carreras universitarias y los postgrado a “ganar más dinero” y a tener una mejor posición en la sociedad.
Algunas de las personas más influyentes en México y en el mundo han querido convencer a las nuevas generaciones de que los estudios profesionales no son importantes. Algunas de estas personas han sido:
· El empresario Ricardo Salinas Pliego aseguró que pasarse la vida estudiando no sirve para nada, ya que dijo, no genera ningún tipo de experiencia a la hora de emprender un negocio.
“Yo le digo a los chicos que no es cierta la idea de que entre más estudien y más grados tengan mejor les va a ir”, dijo durante su plática con jóvenes en la EXMA 2022 evento de Marketing realizado en septiembre del 2022.
En su lugar, el empresario recomienda “salir a hacer las cosas, porque cuando te la pasas de carrera en carrera, un postgrado y luego un doctorado… ese ‘wey’ no sirve para nada”, agregó en su peculiar estilo.
· Según Anna Wintour, la mujer más poderosa del mundo de la moda tampoco fue a la universidad. Con 15 años comenzó a trabajar en una boutique, tras acabar la secundaria hizo algunos cursos de moda pero los dejó porque se dio cuenta de que “o sabes de moda o no sabes”. De ahí entró en una revista llamada Oz, y con los años y tras pasar por varias cabeceras llegó a Vogue donde reina desde hace 30 años.
· Según Elon Musk Tener un título universitario no significa que poseas “una habilidad excepcional” pues se puede aprender cualquier cosa en línea de forma gratuita ya que muchas universidades no enseñan las habilidades que los líderes empresariales más necesitan en su fuerza laboral. Musk afirma que empresas como LinkedIn reportó que muchas de las empresas más populares, entre ellas estos gigantes tecnológicos, no requieren que los empleados tengan un título universitario.
· La vida de Oprah Winfrey es una historia de superación personal que ha inspirado a muchas personas y ha sido contada en Business Insider. Creció en un ambiente extremadamente pobre pero eso no le impidió conseguir una beca para la Universidad de Tennessee.
Sin embargo, a los 19 años abandonó los estudios universitarios y apostó por una carrera en los medios de comunicación. Antes de cumplir los 20 años se convirtió en la primera presentadora negra de noticias en la televisión de Nashville y eso solo fue el comienzo de su meteórica trayectoria que se consolidaría con su propio show.
Pero también es importante recalcar, que los ejemplos mencionados anteriormente, son particulares y éstos casos de éxito, representan menos del 1% de la población mundial.
¿Y por qué decimos? ¡Ya basta de menospreciar los estudios universitarios o de postgrado!, para ello me parece relevante hablar del nivel de analfabetismo en nuestro país y entender su significado.
El analfabetismo en México se define como la incapacidad de las personas mayores de 15 años, para leer y escribir un recado. Se trata de un indicador en el que, a pesar de que ha habido reducciones progresivas, el avance sigue siendo lento y desigual en todo el territorio nacional.
De acuerdo con las estimaciones del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en el año 2015 había en el país 88.15 millones de personas de 15 años y más en el territorio nacional; de ellas, 4.44 millones eran consideradas como analfabetas, es decir, el 5% de la población en el grupo de edad señalado.
¿Y cómo estamos en estudios de nivel universitario?
De acuerdo con “Animal Político” En México, solo el 17% de los jóvenes logran estudiar la universidad.
Este porcentaje coloca al país como uno con el número más bajo de estudiantes de educación superior entre los países de la OCDE. Solo 1% cuenta con una maestría y menos de esa cantidad con doctorado.
En México acceder a la educación superior aún es un reto, pues solo el 17% de los personas de entre 25 y 64 años logran tener estudios universitarios. Esto coloca al país en los últimos lugares con la proporción más baja entre los países de la OCDE, cuyo promedio es de 37%, según el estudio Panorama de la Educación 2017 de la OCDE.
Algunos países que están por debajo de México son Brasil (15%), China (10%), India (11%), Indonesia (10%) y Sudáfrica (12%).
El estudio detalla que solo 1% de los mexicanos de ese rango de edad tienen una maestría o equivalente, mientras que menos del 1% tienen un doctorado.
Esto contrasta con países como Israel, donde los niveles educativos mayores a la universidad son de 50%; en Australia es de 44; Noruega de 43%, y en Italia de 18%.
En el 2016, el 53% de los adultos jóvenes de 25 a 34 años y el 63% de personas entre los 25 y 64 años sólo contaba con educación por abajo de media superior.
La OCDE destaca que el nivel educativo tiene una relación directa con el empleo, pues entre mayor sea el nivel educativo, la tasa para encontrar un trabajo aumenta.
Para quienes tienen por debajo de nivel medio superior la tasa de empleo es del 65% para personas de 25 a 64 años; mientras que para la población con educación media superior y superior, es de 70% y 80% respectivamente.
Ambas tasas están cerca del promedio de la OCDE de 75% y 84%, respectivamente.
Los ingresos de las personas también aumentan con el nivel educativo alcanzado y en México son considerablemente más altos que en la mayoría de los países de la OCDE si la persona tiene un título universitario.
En México, los adultos con un título de educación superior ganan en promedio más del doble que los adultos solo con estudios de educación media superior, explica el estudio.
Los adultos con un título de técnico superior universitario ganan un 30% más que los que solo tienen estudios de educación media superior. Aquellos que cuentan con un título de maestría o doctorado, ganan casi cuatro veces más que aquellos con educación media superior.
Entonces, ¿Para qué sirve estudiar una carrera universitaria o un postrado?
De acuerdo con la “Universidad ETAC” estudiar una carrera universitaria es una de las mejores formas para poder desarrollar tu poder intelectual, el cual se alimenta por medio de una formación académica que esté alineada con tus intereses, aptitudes y objetivos.
También la “Universidad ETAC” menciona que las razones para estudiar la universidad no solo se limitan a obtener un título que se sume algo al nombre o descripción de una persona, sino que también es el acceso a muchas oportunidades de desarrollo personal y profesional.
Entre los principales motivos por los cuales estudiar una carrera universitaria es importante, se encuentran:
· Certifica a una persona como alguien con conocimientos avanzados en un área determinada
· Permite el desarrollo de habilidades específicas técnicas e intelectuales
· Mejora las habilidades sociales y de comunicación
· Permite el acceso a diferentes oportunidades laborales
· Contribuye a la madurez emocional
Estos motivos tienen como consecuencia muchos otros que ayudan a la construcción de una trayectoria profesional y un patrimonio que mejoren la calidad de vida de todos aquellos que decidan prepararse academicamente con una carrera universitaria.
Si bien una carrera universitaria o un postgrado no te garantizan el éxito, te ayudan a desarrollar habilidades, emocionales e intelectuales.
Si uno de los principales problemas de nuestro país es la baja población con educación y más aún, con estudios profesionales, dejemos de decir que los estudios universitarios y de postgrado no sirven para nada y que no te garantizan el éxito. Tal vez no nos garantizan el éxito, pero si nos pone más cerca de él, así decidas tener un empleo o iniciar un emprendimiento, los estudios serán la base para llevar a buen puerto esos planes que tienes en tu vida profesional.
El mismo Ricardo Salinas Pliego en una entrevista que le realizaron mencionó: “Sí quieres poner un negocio y no sabes contabilidad, mejor no lo hagas”, pero se le olvidó mencionar que la contabilidad y las finanzas se aprenden……. en la universidad!